Terapia Sistémica

La Terapia Sistémica, también llamada Terapia Familiar es una forma de psicoterapia que se enfoca en el funcionamiento y las relaciones de un sistema social, como una familia, una pareja o un grupo. Esta terapia se basa en la idea de que los problemas emocionales y conductuales de una persona no se deben solo a factores individuales, sino también a dinámicas interpersonales y de grupo.

El terapeuta sistémico trabaja para identificar patrones de interacción disfuncionales dentro del sistema social del paciente y para ayudar a los miembros del sistema a mejorar su comunicación, colaboración y respeto mutuo. La terapia sistémica se centra en la identificación y el cambio de los patrones de comunicación y comportamiento disfuncionales, y en la promoción de relaciones más saludables y satisfactorias.

La terapia sistémica también puede incluir la exploración de patrones de conducta repetitivos y la identificación de posibles factores de estrés y conflictos en el sistema social del paciente. Se pueden utilizar diversas técnicas y enfoques para lograr estos objetivos, como el cuestionamiento circular, la observación sistemática, el genograma y las técnicas de juego de roles.

En resumen, la terapia sistémica se enfoca en los sistemas sociales y las dinámicas interpersonales, con el objetivo de mejorar la comunicación, la colaboración y el bienestar de los miembros del sistema. Esta terapia es especialmente útil en el tratamiento de problemas familiares, de pareja y de grupo.